"Así, pues, todas las veces que comiereis este pan, y bebiereis esta copa, la muerte del Señor anunciáis hasta que él venga." 1 Corintios 11:26
El sábado 07 de febrero de 2009, se realizo la primera Santa Cena del año, sin la presencia del Pastor y con la predicación del anciano Carlos Gamero quien recordó la importancia de este destacado rito que se realiza cada 3 meses.
La mesa estaba bien decorada con hermosos motivos, allí estaba unos racimos de uva, que nos recuerda el jugo de la vida que simbolicamente representa la sangre de Jesús entregada por todos nosotros, y panes que simbolizan el cuerpo de Cristo partido por todos nosotros.
Luego de leer Juan 13:5-15, en donde dice lo siguiente: "Luego puso agua en un lebrillo, y comenzó a lavar los pies de los discípulos, y a enjugarlos con la toalla con que estaba ceñido...Así que, después que les hubo lavado los pies, tomó su manto, volvió a la mesa, y les dijo: ¿Sabéis lo que os he hecho?Vosotros me llamáis Maestro, y Señor; y decís bien, porque lo soy. Pues si yo, el Señor y el Maestro, he lavado vuestros pies, vosotros también debéis lavaros los pies los unos a los otros.Porque ejemplo os he dado, para que como yo os he hecho, vosotros también hagáis."
Después de leer estos versículos pasamos todos a la parte de atrás del templo para el rito de humildad siguiendo el ejemplo que nuestro Señor nos dejó.
Luego de este sencillo rito pero con un significado tan profundo la ceremonia de la celebración de la Cena del Señor continuo con la lectura de los versículos tan conocidos de corintios 11: "Porque yo recibí del Señor lo que también os he enseñado: Que el Señor Jesús, la noche que fue entregado, tomó pan;y habiendo dado gracias, lo partió, y dijo: Tomad, comed; esto es mi cuerpo que por vosotros es partido; haced esto en memoria de mí.Asimismo tomó también la copa, después de haber cenado, diciendo: Esta copa es el nuevo pacto en mi sangre; haced esto todas las veces que la bebiereis, en memoria de mí." 1 Corintios 11:23-25.
Se oro por el pan y el jugo de la vid se procedió a su distribución y todos los presentes participaron.
La ceremonia finalizo después de un hermoso mensaje dado por nuestro anciano Carlos Gamero. Termino esta nota con una cita de nuestra mensajera Elena G de White que dice: "Al participar con sus discípulos del pan y del vino, Cristo se comprometió como su Redentor. Les confió el nuevo pacto, por medio del cual todos los que lo reciben llegan a ser hijos de Dios, coherederos con Cristo. Por medio de este pacto venía a ser suya toda bendición que el cielo podía conceder para esta vida y la venidera. Este pacto debía ser ratificado por la sangre de Cristo. La administración del sacramento había de recordar a los discípulos el sacrificio infinito hecho por cada uno de ellos como parte del gran conjunto de la humanidad caída" (Deseado de todas la gentes p, 612,613)
La mesa estaba bien decorada con hermosos motivos, allí estaba unos racimos de uva, que nos recuerda el jugo de la vida que simbolicamente representa la sangre de Jesús entregada por todos nosotros, y panes que simbolizan el cuerpo de Cristo partido por todos nosotros.
Luego de leer Juan 13:5-15, en donde dice lo siguiente: "Luego puso agua en un lebrillo, y comenzó a lavar los pies de los discípulos, y a enjugarlos con la toalla con que estaba ceñido...Así que, después que les hubo lavado los pies, tomó su manto, volvió a la mesa, y les dijo: ¿Sabéis lo que os he hecho?Vosotros me llamáis Maestro, y Señor; y decís bien, porque lo soy. Pues si yo, el Señor y el Maestro, he lavado vuestros pies, vosotros también debéis lavaros los pies los unos a los otros.Porque ejemplo os he dado, para que como yo os he hecho, vosotros también hagáis."Después de leer estos versículos pasamos todos a la parte de atrás del templo para el rito de humildad siguiendo el ejemplo que nuestro Señor nos dejó.
Luego de este sencillo rito pero con un significado tan profundo la ceremonia de la celebración de la Cena del Señor continuo con la lectura de los versículos tan conocidos de corintios 11: "Porque yo recibí del Señor lo que también os he enseñado: Que el Señor Jesús, la noche que fue entregado, tomó pan;y habiendo dado gracias, lo partió, y dijo: Tomad, comed; esto es mi cuerpo que por vosotros es partido; haced esto en memoria de mí.Asimismo tomó también la copa, después de haber cenado, diciendo: Esta copa es el nuevo pacto en mi sangre; haced esto todas las veces que la bebiereis, en memoria de mí." 1 Corintios 11:23-25.
Se oro por el pan y el jugo de la vid se procedió a su distribución y todos los presentes participaron.
La ceremonia finalizo después de un hermoso mensaje dado por nuestro anciano Carlos Gamero. Termino esta nota con una cita de nuestra mensajera Elena G de White que dice: "Al participar con sus discípulos del pan y del vino, Cristo se comprometió como su Redentor. Les confió el nuevo pacto, por medio del cual todos los que lo reciben llegan a ser hijos de Dios, coherederos con Cristo. Por medio de este pacto venía a ser suya toda bendición que el cielo podía conceder para esta vida y la venidera. Este pacto debía ser ratificado por la sangre de Cristo. La administración del sacramento había de recordar a los discípulos el sacrificio infinito hecho por cada uno de ellos como parte del gran conjunto de la humanidad caída" (Deseado de todas la gentes p, 612,613)
No hay comentarios:
Publicar un comentario